Informe Evolución de la familia en Europa, 2018
El Instituto de Política Familiar ( IPF) presentó en el Parlamento Europeo el Informe de Evolución de la Familia en Europa 2018 coincidiendo con la celebración del aniversario del Día Internacional de la Familia.
El Día Internacional de la Familia que estamos celebrando está siendo una magnífica oportunidad para recordar a la sociedad en general y a los responsables políticos en particular la necesidad y la urgencia de fortalecer la institución familiar.
Las principales conclusiones del informe son:
Europa está inmersa en un invierno demográfico sin precedentes y se convirtió en un continente viejo, con un gran déficit de natalidad agravado por el incremento del número de abortos y con cada vez menos matrimonios y más rupturas.
Los indicadores de población, de natalidad, de matrimonios, de ruptura familiar empeoraron sustancialmente en Europa, poniendo en evidencia que los problemas de familia se convierten en graves problemas de la sociedad.
Los datos del informe son elocuentes y concluyentes: Europa está en un invierno demográfico y ya hoy es un continente viejo -de hecho las personas mayores de 65 años ya superan en más de 18 millones a los chicos menores de 15 años-.
El problema de la natalidad se volvió crítico ya que cada vez nacen menos niños (1,5 millones nacimientos menos que hace 40 años) y además hay un millón de abortos anuales, que lo convierte -junto al cáncer- en la principal causa de mortalidad en Europa.
Está produciéndose un destrozo de los matrimonios, con cada vez menos matrimonios y más rupturas- 1 millón de divorcios anuales- y con los hogares vaciándose (7 de cada 10 hogares europeos no tienen ningún niño)”. Europa está convirtiéndose en una sociedad desestructurada, de individuos sin ningún tipo de interrelación.
Sigue sin resolverse la deficitaria conciliación entre la vida laboral y la vida familiar.
Ante este panorama ciertamente desolador, el informe señala que es urgente cambiar y reforzar las políticas familiares que vienen desarrollando las distintas administraciones de los Estados de la Unión, de manera que se basen en la perspectiva de familia, para facilitar el cumplimiento correcto de sus funciones. Y es que una política de familia que apunte expresamente al concerniente al grupo familiar en cuanto medio afectivo, educativo, económico y social, supone que no se legisle sólo en términos de individuos, sino en términos y en función de personas que viven en una familia. Y una política de familia limitada exclusivamente a las políticas sectoriales o a planes integrales para los miembros de la familia en cuanto individuos, resulta siempre una política familiar incompleta e ineficaz.
Con las aportaciones de este informe, y su presentación en Bruselas, se abrió la puerta -y así nos lo expresaron algunos eurodiputados y representantes de Ong- a que los temas de familia se debatan, ineludiblemente, dentro del Parlamento Europeo.
Pique aquí para descargar o informe: http://ipfe.org/Espa%C3%B1a/Documento/112