En junio escribíamos sobre el derecho al olvido en la red. Para responder a la pregunta de cómo usa Google nuestros datos personales, haremos lo que nunca hacemos: echar un ojo a la política de privacidad. Además, el miércoles os hablaremos del estudio «Privacy Index»: queremos más privacidad pero no protegemos nuestros datos personales.
Cómo usa Google los datos que recoge
Google emplea la información que recoge para «proporcionar servicios, mantenerlos, protegerlos y mejorarlos». Pero también para ofrecer contenido personalizado como resultados de búsqueda y anuncios relevantes.
Pueden usar el nombre que proporciones para el perfil de Google en todos los servicios en los que sea necesario disponer de una cuenta de Google. Dicho de otra manera, si tenéis una cuenta en Google, ya disponéis de perfil en Google +, Youtube, etc. Si un usuario dispone de nuestra dirección de correo electrónico o de datos que sirvan para identificarnos, Google le mostrará los datos de nuestro perfil público: nombre, fotografía, etc.
Según Google emplean la información que recogen de cookies y otras tecnologías para «mejorar la experiencia de usuario». Al guardar las preferencias de idioma, por ejemplo, nos ofrecerán todos sus servicios en el idioma que prefiramos.
Por último, Google puede combinar información personal de un servicio con otro tipo de información, incluida información personal, de otros servicios de Google. Sirve, por ejemplo, para que sea más fácil compartir información con las personas que conocemos.
¿Qué información comparte Google?
Google dice que «no compartimos información personal con empresas, organizaciones o particulares que no tengan relación con Google». Pero establece una larga lista de excepciones. La primera es que no compartirán información personal, a no ser que demos nuestro consentimiento.
Además, entre otras excepciones, proporcionan información personal de usuarios a afiliados, personas o empresas de su confianza que deben seguir sus instrucciones y mostrar su conformidad con la política de uso de datos.
Puede que pronto volvamos a analizar su política de privacidad para, por ejemplo, saber cómo protegen nuestros datos.